Francia es mundialmente famosa por su gastronomía y su refinamiento natural en el ámbito culinario. Esta cultura del buen yantar no está reservada exclusivamente para las élites, y el día a día de un francés medio está sazonado con tradiciones culinarias. ¿Ya las conoce todas? El desayuno es la primera comida de la jornada. Francia es uno de los pocos países en los que se desayuna dulce. Nada de panceta ni huevos, la pastelería es el centro de todo: cruasán, napolitanas, ensaimadas y tostadas con mantequilla y mermelada. Muchos se dan un paseo andando (o en bici) hasta la panadería más cercana para comprar bollería recién salida del horno. ¿Está familiarizado con la merienda? Se trata con toda seguridad de la comida preferida de los escolares: una dulce pausa que los franceses degustan sobre las 16h y 16h30 (justo después del colegio). Pan con chocolate caliente, bizcochos, galletas o incluso pastel: la merienda es sin duda un rato estupendo. Por último, y sobre todo, el aperitivo es sinónimo de convivencia: algo ligero para picar, cacahuetes, salchichón, aceitunas y otras tapas como pretexto para tomar una copa (anís, porto, clarete, rosado o una cerveza) y abrir el apetito.
La comida es omnipresente en Francia, incluso en el idioma hablado. Existen cantidad de expresiones en francés que hacen referencia a la comida. Algunos ejemplos que podrá añadir a su vocabulario. "Tener un corazón de alcachofa" se dice de alguien que se enamora con facilidad. En la carretera, para pedir a alguien que acelere, los franceses gritan: "¡pisa el champiñón! "y si alguien le dice "qué berza eres" ¡es que le gusta!
Seguramente podrá encontrar productos franceses en su país de origen, pero nada comparado con el original. Por eso, venga a Francia, organice una fiesta para sus papilas gustativas y mejore su nivel de francés al mismo tiempo (todos hablamos mejor francés después de una copa de vino ¿verdad?). Pero, ¿por dónde empezar con tantas maravillas gastronómicas y tan poco tiempo? No se preocupe, le ofrecemos una solución: nuestros paréntesis culinarios. Estos interludios para gourmets, en los que presentamos varios temas en función de la temporada, están organizados por profesionales que le ofrecerán lo mejor de las especialidades francesas. Nuestra situación geográfica supone también una oportunidad perfecta para descubrir los sabores mediterráneos y las especialidades de la región, como olivadas, los rellenos y la socca. Reunirse para comer y beber es una forma estupenda de conocer a gente y charlar sobre temas varios. ¡Gracias a nuestros cursos podrá llevar a cabo todo esto en francés!
Estancia de idiomas en el Centre International d'Antibes